Así es por dentro un Router de Fibra Óptica.
El elemento central de una conexión de internet es el router. Gracias a él tenemos internet en casa, ya sea a través del cable de red o de WiFi.
Las operadoras entregan al usuario
su propio router junto con la instalación de ADSL o fibra, aunque siempre tenemos la
posibilidad de adquirir uno nuevo con tecnologías más recientes o con
más opciones de configuración, por ejemplo.
De todos modos, los proveedores de internet están haciendo un buen trabajo,
en general, de cara a ofrecer a sus clientes un buen router sin
que sientan la necesidad de cambiarlo por uno de más entidad.
En el caso de que las conexión que llega a tu casa sea de fibra,
tradicionalmente había que instalar el cajetín de entrada de la fibra de la
calle para sacar de ahí el cable de fibra que va al ONT (Optical Network
Terminal). Y del ONT, sale el cable de red Ethernet que va hacia el
router propiamente dicho. Es decir, precisamos tener, además del router,
el ONT, con lo que necesitamos dos “aparatos”, sus
respectivas fuentes de alimentación y sus cables para disfrutar de la fibra.
Si queremos usar un router propio, necesitaremos del ONT, sí o sí, para
llevar la conexión Ethernet que sale de ella hasta la entrada WAN en el router, salvo
que tengamos uno que integre el ONT, además de WiFi, Ethernet, USB o las
conexiones de teléfono.
Justamente esto es lo que ha hecho Orange con su router LiveBox Fibra: mover
el ONT hacia el router para ahorrarnos un dispositivo más y sus
cables, manteniendo el resto de funcionalidades, como son las líneas de
teléfono o la preinstalación de la televisión.
EL LIVEBOX FIBRA
Tradicionalmente, los proveedores de internet han ido un paso por detrás en
el campo de los routers comparados con las grandes marcas dedicadas al
networking, pero ahora se están empeñando en ofrecer propuestas con un
buen nivel tecnológico.
El Livebox Fibra aúna en un único dispositivo tanto el ONT como las
tomas de teléfono, las Ethernet y las tecnologías WiFi inalámbricas.
También viene preconfigurado para usar el servicio de TV si lo contratásemos.
Este es el interior del Livebox Fibra. Como podéis ver, se aprecia
claramente el punto por donde entra la fibra a la izquierda, conectada
al chip que convierte la información codificada como luz en datos digitales encapsulables
en las redes Ethernet y WiFi, en general, y como voz, datos o televisión,
si diferenciamos los contenidos que maneja el router de Orange.
El chip que veis en el medio, de Toshiba y de color negro, es la ROM donde
está el firmware del router. El resto de componentes están a cargo de desempeñar
las tareas de comunicaciones del router, ya sean Ethernet, WiFi, voz
digital o televisión y también la gestión de periféricos USB conectados a
través del puerto USB 2.0 correspondiente.
En la parte de la derecha se pueden ver cuatro conectores en línea. Son los
de la antenas, que en este router son cuatro para la
tecnología WiFi 802.11ac, la más rápida del momento para las comunicaciones en
el hogar.
Las antenas permiten aumentar la velocidad de transferencia sumando
los datos enviados por cada una de ellas en paralelo. Así, con cuatro
antenas tenemos hasta 1.700 Mbps máximos teóricos de ancho de banda, que sale
de multiplicar por cuatro el de una única antena: 433 Mbps. En realidad es
1.732 Mbps, pero se redondea habitualmente a 1.700 Mbps.
En la tecnología WiFi 802.11n, tenemos dos antenas para sumar sus anchos de
banda. Así obtenemos 2 x 150 Mbps (300 Mbps) para la
tecnología WiFi n. Las antenas están dispuestas en los laterales del router en
la parte interior. El uso de varias antenas para transmitir datos se llama MIMO
(Multiple Input Multiple Output) y además puede transmitir a varios
dispositivos a la vez gracias a que es MU-MIMO (MU-MIMO) o Multi User MIMO.
Hay antenas de diferentes tamaños y ubicaciones, y parte de los componentes
están protegidos por placas de metal (apantallamiento) para evitar que
las emisiones de radiofrecuencia afecten al comportamiento del
procesador, por ejemplo. Estas antenas hacen innecesario instalar las de
exterior habituales en otros routers, lo cual beneficia a los usuarios a la
hora de instalar el dispositivo en una mesa o estantería.
QUE PUEDO HACER CON EL ROUTER
Además de gestionar y configurar las redes inalámbricas y cableadas de la
red, con este router podemos manejar llamadas de voz IP a través de los
teléfonos analógicos que conectemos en los terminales RJ11 (los más
pequeños) o conectar el set top box de Orange para ver la televisión
si la hemos contratado.
La voz en los teléfonos analógicos es, en realidad, digital. En el router, la
voz se digitaliza y se encapsula en un formato compatible con el protocolo de
voz IP SIP. Llega a los servidores de Orange en forma digital y desde allí
se establecen las comunicaciones con las redes de telefonía clásica o de móvil,
dependiendo de a qué número llamemos.
Tanto es así que podemos incluso configurar nuestro smartphone como
un softphone (teléfono mediante software) usando la app
Orange Softphone, que tan solo precisa enlazar el smartphone
con el router Livebox Fibra usando el botón WPS para que podamos
configurar el móvil como teléfono, de modo que podemos incluso hacer dos
llamadas a la vez (que no es lo mismo que tener dos líneas).
El set top box para la televisión de Orange se tiene que conectar
necesariamente a uno de los puertos Ethernet del router y solo a uno.
Esto es así porque este dispositivo viene preconfigurado para crear una red
virtual a través de ese puerto de red donde se tienen los parámetros
necesarios para que la televisión funcione como debe.
Es similar a lo que sucede si queremos usar un router diferente del
de Orange, usando el ONT independiente. El cable de red que sale del ONT
hay que conectarlo, salvo excepciones, a un puerto de red que permita ser
configurado como red virtual para tener acceso a internet.
También podemos conectar dispositivos de almacenamiento o
impresoras al puerto USB de la parte trasera. De ese modo estarán
compartidos en la red, siempre y cuando lo configuremos con los permisos
adecuados.
El botón de encendido y apagado, así como el de Reset, son de especial
interés para las tareas de mantenimiento en caso de que tengamos que reiniciar el
dispositivo; sin olvidar los dos frontales para conectar y
desconectar la red WiFi o para enlazar
inalámbricamente dispositivos compatibles con WPS, como sucede con el
smartphone cuando configuramos la aplicación Softphone de Orange.
EL ESTADO DEL ROUTER
El estado del router se puede conocer en todo momento a través de los LEDs
frontales, o bien accediendo a la configuración del router usando un
navegador web que apunte a la dirección IP 192.168.1.1 una vez lo
hayamos conectado por cable o WilFi al ordenador. Recordad que la
contraseña de administración es la misma que aparece en la pegatina de la parte
inferior del router para configurar las redes WiFi por defecto.
De este modo, estaremos accediendo a su particular sistema operativo y podremos
configurar prácticamente todos los parámetros de funcionamiento: desde
las claves y el nombre de las redes WiFi, hasta es estado de los dispositivos
conectados a la red local.
UNA BUENA Y ELEGANTE SOLUCIÓN
El resultado es un router que consigue eliminar la necesidad de
tener dos dispositivos separados para usar la conexión de fibra. Ocupa
poco espacio, y cuenta con tecnologías capaces de aprovechar al máximo la
velocidad de la fibra de 300 Mbps o de la de 500 Mbps. También integra las
comunicaciones de telefonía fija y el acceso al servicio de televisión.
Con sus cuatro antenas y tecnología MU-MIMO está al día en
cuanto a tecnología de red WiFi, y se puede gestionar mediante las
apps My Livebox o Livebox Media Share. Un buen ecosistema, fácil y
bien pensado incluso para usuarios con pocos conocimientos técnicos.
Puedes Compartirlo en tus * Redes Sociales *
Comentarios
Publicar un comentario